Retribución social: exponer las comunidades locales al arte contemporáneo
Andrés Maduro es el cofundador del programa de residencias Conexión Drácula y propietario del jardín botánico Finca Drácula que lleva el nombre de la joya de esta colección de orquídeas, la Orquídea Drácula.
Conexión Drácula es un programa anual que se organiza cada año en torno a una temática y que reúne a un grupo de artistas de diversas disciplinas, así como a botánicos y científicos. Aprovechando la oportunidad de traer mentes creativas, y dado que el jardín botánico está situado al norte de Panamá y a unas siete horas de la capital, los fundadores comprendieron rápidamente la importancia de que la comunidad local interactuara con estos artistas contemporáneos. "Al artista al ser seleccionado para participar en la residencia, se le explica que hay una parte de talleres comunitarios y entonces es totalmente voluntario si quieren hacerlo. Pero hemos encontrado que muchos de los artistas les gusta hacer esto y vienen ya con ideas", explica Andrés Maduro.
Para organizar estos encuentros entre los artistas y las comunidades, los artistas forman equipos de interés al principio de la residencia para crear actividades orientadas a la comunidad que luego se comunicarán a los lugareños. "Se han hecho varios tipos de talleres, talleres no solamente de artes plásticas, sino talleres de literatura, de expresión corporal, talleres de fotografía con los niños. Y los talleres es de todas las edades, vienen desde madres de familia hasta los niños {...} Es el aporte que hacen los artistas a inspirar al pueblo", añade el fundador.
Estas actividades exponen a los lugareños a las artes contemporáneas, participando así en la descentralización de la cultura hacia las poblaciones más aisladas. "Cuando los artistas terminan sus obras, sean artes plásticas o artes escénicas, abrimos la finca a la comunidad para que puedan entrar gratuitamente y conocer las obras, conversar con los artistas y preguntarles qué es lo que hicieron, por qué lo hicieron. Y para ellos es algo que causa una impresión", confiesa Andrés Maduro.
Entre las numerosas actividades organizadas en torno a los residentes, una presentación de arte escénico encontró un éxito salvaje, convirtiéndose en una ópera contemporánea con numerosas representaciones multitudinarias. "Todos salieron impactados. En las escenas donde salía la orquídea Drácula, algunos salían con miedo de la de la presentación y causó un impacto sobre las personas. {…} es una experiencia que se llevarán para el resto de sus vidas", concluye Andrés Maduro.